Si pensabas que los alimentos eran los únicos que tienen fecha de caducidad, estas equivocado.
Existen productos de uso personal, limpieza y accesorios que también tienen fecha de caducidad.
Aquí te presentamos algunos de ellos, que es importante revisar cuanto antes en casa.
Todos deberíamos renovar nuestra ropa interior al menos una vez al año.
Además, es importantes lavarla bien y cambiarla todos los días.
Deberías cambiarlo cada tres meses.
También es aconsejable cambiarlo si hemos pasado por alguna enfermedad, como gripe, catarro, anginas o alguna enfermedad bucal, para evitar que tengas una recaída.
Hay que reemplazarla cada semana.
¿Tan a menudo? Estos pequeños artículos de baño rápidamente forman hongos y moho. La humedad es el lugar perfecto para que crezcan microorganismos que se pueden extender a nuestra piel y causar erupciones o infecciones.
Hay que cambiarlas cada año o máximo tres años.
Con el paso del tiempo pierden su suavidad y su capacidad de absorción, por lo que tardan más en secarse, provocando que se retenga la humedad y generen bacterias.
Debemos reemplazarlo cada año.
Debes limpiarlo cada semana para quitarle cabello o pelusa que se acumule, para posteriormente lavarlo con agua jabón y un desinfectante.
Los cepillos también tienden a acumular bastantes gérmenes.
Cámbialas cada seis meses.
Es necesario lavarlas constantemente, pero, si tuviste algún problema cutáneo, (ejemplo hongos en los pies) cámbialas de inmediato.
Hay que cambiarlo cada ocho o diez años.
Pasado este tiempo, el colchón pierde su confort y su forma original.
Es muy importante que observes si al despertar tienes dolores, es posible que se deba a que tu colchón es demasiado viejo.
Se deben cambiar cada dos o tres años y lavarlas cada tres meses.
Las almohadas o cojines pierden su forma y pueden causarnos dolor en el cuello.
Según advierte la organización The Sleep Council: “Una almohada vieja y sin lavar puede contener el 10% de su peso de ácaros, polvo y bacterias.”
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