En su reciente visita a Bogotá como parte de su gira 2024, Luis Miguel dejó huella en la escena gastronómica de la ciudad.
El afamado cantante, acompañado de su equipo y del también exitoso reguetonero Maluma, optó por disfrutar de una velada en el exclusivo restaurante La Cabrera, uno de los lugares más destacados de la región.
En La Cabrera, Luis Miguel se distinguió por su amabilidad y cordialidad hacia el personal del establecimiento.
Durante la cena, el artista se decantó por las cazuelas, platos típicos del lugar que incluyen una exquisita mezcla de ingredientes como espinaca, manzana, ajos caramelizados, creme brulé, puré de papa y coliflor.
Además de las cazuelas, el astro mexicano no escatimó en su elección de platillos y solicitó un jugoso tomahawk, un generoso corte de carne, acompañado de una fresca ensalada.
Para maridar su cena, Luis Miguel optó por una botella de vino tinto de alta gama. La cuenta, que rondó los cuatro millones de pesos colombianos, refleja la exquisitez de la experiencia gastronómica.
El gesto de Luis Miguel no se limitó al pago, ya que el cantante dejó una generosa propina para el personal del restaurante. Además, accedió a tomarse fotos con empleados y comensales que lo reconocieron y plasmó su autógrafo en uno de los platos.
Con gratitud y satisfacción, el artista se retiró de La Cabrera para descansar antes de su segundo y último concierto en Bogotá, donde el cariño de sus fans le esperaba con mensajes de admiración y agradecimiento.
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