No es casualidad cuando un perro llega a nuestras vidas, estos seres son muy especiales. En general vienen como guardianes de la familia o de un miembro en específico, son guías de luz encarnados, algunos vienen a cancelar algún karma familiar o personal de su dueño.

El perro es un guardián en el plano astral, y puede ser diferente a como es en el plano físico. Probablemente asumirá alguna forma que nuestra mente reconozca para que no temamos y nos sintamos seguros, o simplemente estará como observador, cuidandonos.

   

¿Cómo nos ayudan los perros?

 
  • Su mirada conecta con nuestra alma.
 
  • Es un ángel guardián.
 
  • Los perros vienen a enseñar el amor incondicional, no juzgan, no critican, no se ofenden, no almacenan rencor, resentimiento o molestia.
 
  • Su constante jadeo, recicla la energía alrededor, absorbe y depura, es su manera de transpirar; el sudor es una manera de sacar toxinas.
 
  • El continuo movimiento de su cola activa y da fortalece sus primeros chakras (base y sacro), aumentando el campo vibratorio de la persona. 
 
  • Ellos vienen a proteger energéticamente a su compañero humano. Por eso es tan común que repentinamente un perro se enferme, o que si su amigo humano esté en riesgo lo presienta, o que, tras la muerte del humano, él se deje morir.
 
  • Los perros viven en promedio 8 veces menos que el humano, esto es porque como ya se dijo, vienen a una misión determinada.
 
  • No solo son leales en vida, sino después de cumplir su misión en la Tierra
   

Recuerda que, si lo maltratamos, comienza a salir  su parte genética de su estructura primitiva de “lobo”, se hacen agresivos y desconfiados.

 

¡Ámalo cuídalo y honra su presencia!

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